Santo Domingo, República Dominicana – El Poder Judicial anunció hoy la exitosa culminación de la primera etapa de su proyecto de “Mudanza Digital”, un paso trascendental en la modernización de los servicios judiciales en el país. Esta fase inicial se concentró en la transformación tecnológica de los tribunales civiles y el Tribunal Superior Administrativo, que anteriormente operaban en el obsoleto edificio de las Cortes del Distrito Nacional.
La drástica medida se aceleró por la amenaza a la seguridad que representa el antiguo edificio, ubicado en el Centro de Los Héroes. Un estudio de vulnerabilidad estructural reveló la necesidad urgente de reubicar y digitalizar los servicios para prevenir riesgos ante un posible sismo.
Desde el 6 de mayo, los servicios de estos tribunales operan en un formato completamente digital, marcando un cambio radical: el 91.8% de las gestiones se realizan ahora en línea, en contraste con el 97% de trámites presenciales que se manejaban previamente. Un logro destacado de esta primera fase ha sido el auge de las audiencias virtuales, que pasaron de representar menos del 0.5% a alcanzar el 46.76% en mayo en los tribunales Civil, Contencioso y Administrativo. Esta transformación no solo agiliza los procesos, sino que también garantiza la transparencia y accesibilidad de la justicia.
Para respaldar esta transición, el Poder Judicial habilitó un Espacio de Formación y Asistencia Digital, donde se han registrado 2,867 nuevos usuarios en la plataforma de Acceso Digital, sumando un total de 13,429 personas. Además, 42 nuevas instituciones, tanto públicas como privadas, se han integrado al sistema.
El teletrabajo también se ha convertido en un pilar fundamental de este nuevo modelo. De 339 servidores judiciales identificados, 190 ya operan bajo esta modalidad, incluyendo 22 jueces. A ellos se suman 105 colaboradores del Registro Inmobiliario que también trabajan de forma remota.
Las próximas etapas de la “Mudanza Digital” incluirán la creación de salas híbridas y presenciales, mejoras en la plataforma digital y un programa de capacitación a cargo de la Escuela Nacional de la Judicatura. La tercera fase contempla la adecuación del edificio del Catastro Nacional para que sea la sede definitiva de jueces y servidores judiciales.
Con esta ambiciosa transformación, el Poder Judicial reafirma su compromiso con una justicia moderna, inclusiva y eficiente, que aprovecha la tecnología para ampliar el acceso a la ciudadanía y fortalecer el Estado de derecho.