Austin, Texas – El exjugador de la NBA Jason Collins, conocido por hacer historia como el primer atleta activo en las grandes ligas deportivas de Estados Unidos en declararse abiertamente gay, contrajo matrimonio esta semana con su pareja de casi una década, el productor de cine Brunson Green. La ceremonia, celebrada en Austin, Texas, selló una relación que ha sido un símbolo de orgullo y visibilidad.
Collins, un imponente pívot de 7 pies de altura y calzado talla 19 durante su carrera en la liga, compartió su felicidad con Green, cuyo semblante radiante no pasó desapercibido en las imágenes difundidas del enlace. La pareja, que ha estado junta desde 2014, se comprometió en 2023 durante la Noche del Orgullo de los Lakers en Los Ángeles.
Un camino de valentía y visibilidad
El matrimonio de Collins y Green es un hito significativo, no solo en sus vidas personales, sino también para la comunidad LGBTQ+ y el mundo del deporte. Jason Collins rompió barreras en 2013 al publicar un ensayo personal en Sports Illustrated donde revelaba su orientación sexual, un acto de valentía que resonó globalmente y abrió un nuevo capítulo para la inclusión en el deporte profesional.
A lo largo de sus 13 temporadas en la NBA, Collins jugó para equipos como los New Jersey Nets, Memphis Grizzlies, Minnesota Timberwolves, Atlanta Hawks, Boston Celtics y Washington Wizards, y más tarde regresó a los Brooklyn Nets. Su impactante revelación lo convirtió en un referente, demostrando que la autenticidad no solo es posible, sino que es fundamental, sin importar la profesión o el estatus.
La unión de Collins y Green celebra una historia de amor y un testimonio de la evolución social, reafirmando el mensaje de que el amor no tiene límites ni prejuicios. Su matrimonio es un recordatorio poderoso de la importancia de la diversidad y la aceptación en todos los ámbitos de la vida.