SANTO DOMINGO – El Ministerio de Salud Pública (MSP) ha dado inicio a una serie de actividades para conmemorar la “Semana Mundial de la Lactancia Materna”, que se celebra del 1 al 7 de agosto. El objetivo es promover entornos sostenibles que apoyen esta práctica, esencial para la salud de madres y bebés.
Bajo el lema “Prioricemos la lactancia materna: crear sistemas de apoyo sostenibles”, la campaña busca alinear al país con las metas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef de alcanzar un 50% de lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida para 2025.
A nivel global, la lactancia materna exclusiva alcanza solo el 38% de los recién nacidos. Sin embargo, en República Dominicana, la situación es más crítica, con una cifra de apenas 16%, según datos de la Encuesta Enhogar 2019 de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
El doctor Tamy Santana Monsanto, encargado del Programa Materno Infantil del MSP, explicó que este año las acciones están enfocadas en fortalecer los sistemas de apoyo a nivel institucional y comunitario. “Un sistema sostenible de apoyo a la lactancia materna debe involucrar a toda la sociedad, garantizando el entorno, la información y los recursos adecuados desde el embarazo hasta los primeros dos años de vida del niño y más allá”, señaló.
Actividades y estrategias de la campaña
Las actividades programadas incluyen:
Jornadas de sensibilización en Direcciones Provinciales y de Áreas de Salud.
Apertura de nuevas Salas Amigas de la Lactancia Materna.
Campañas en redes sociales.
Charlas educativas en instituciones públicas y privadas.
El doctor Santana Monsanto destacó que el acompañamiento a las madres debe comenzar desde el periodo prenatal, con personal de salud capacitado. Sostuvo que la lactancia materna debe integrarse plenamente en los sistemas de salud, entornos laborales y comunidades.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna, instituida en 1992, busca sensibilizar sobre su importancia no solo como nutrición, sino como un derecho fundamental de la infancia, clave para reducir la mortalidad infantil y fortalecer el vínculo entre la madre y el hijo.