República Dominicana se ha consolidado como el socio “ideal” para Estados Unidos, afirmó ayer el presidente Luis Abinader. Entre las razones que sustentan esa posición, el mandatario destacó dos factores clave: una ubicación geoestratégica “envidiable” y una conectividad “sobresaliente”, lo que ha convertido al país en un destino atractivo para la relocalización de empresas bajo el modelo de ‘nearshoring’. Abinader indicó que el país, ubicado en el corazón del Caribe, está a dos horas de vuelo y dos días de navegación de EE. UU., lo que ha abierto un abanico de ventajas a empresas estadounidenses que necesitan cumplir con los exigentes plazos de sus consumidores y que buscan agilidad en la entrega de sus productos a menos costo.
“Nuestra conectividad e infraestructura logística abren las puertas a más de 900 millones de consumidores”, subrayó en la Conferencia de Ciudades Latinoamericanas, de la Americas Society/Council of the Americas (AS-COA).
El jefe del Estado destacó la relación comercial con EE. UU., que calificó como un “pilar irremplazable” tras más de un siglo de cooperación. Y los números dan cuenta de ello, según Abinader: el 53% de las exportaciones dominicanas llegan al país norteamericano y empresas como Medtronic y Hanesbrands han triplicado sus operaciones en el país, al crear 15,000 empleos en sectores de alta tecnología.